Crítica latinoamericana al rol de la criminología referido a relaciones de poder.
En siglos anteriores y
décadas, la humanidad ha sufrido de delitos graves, en los cuales las peores injusticias
han sido contra personas inocentes; la mayoría de veces las víctimas solo
fueron objetos de experimento donde no se les consideró ningún valor humano ni
social; además del odio que muchos líderes han tenido hacia sus servidores o
esclavos donde a las víctimas les subestimó por sus condiciones físicas o a
nivel social catalogadas como inferiores. Son muchas las situaciones que han
acontecido en la historia de la humanidad, de manera que estos delitos de genocidios
han marcado la conciencia de las personas que hacen parte y se interesan por el
conocimiento de los crímenes a lo largo de la historia.
La
tesis central, que comparto en su totalidad, es que los principales crímenes se
cometen desde la estructura del aparato estatal y que esa criminalidad amenaza
con agigantarse desde una organización hegemónica que comprenda y someta a la
universalidad de los aparatos estatales. (Zaffaronni, 2012, p.14)
Existen las leyes
gubernamentales y penales, establecidas por el estado de cada país, con el fin
de que estas rijan para un control debido de la sociedad; a la vez, que haya
justicia entre el vínculo de los seres humanos.
Pero más allá de esto,
los funcionarios del estado se han encargado de mantener los controles sociales
con respecto a los delitos que las personas cometen y eso sin discusión alguna,
está bien. Sin embargo, se ha venido haciendo conciencia de que muchos crímenes
se han dado de las relaciones de poder; es decir, muchos grandes líderes a
nivel mundial han cometido fraudes muy atroces contra las personas de su misma
nación; en otras ocasiones las víctimas no pertenecen a su gobierno, pero de
igual forma han llevado el liderazgo, pero erróneamente.
Las personas han
creído que los únicos infructuosos han sido individuos fuera de las relaciones
de poder y desafortunadamente esta creencia se ha convertido en una ideología
donde las personas piensan que la todos los gobernantes y líderes promueven la
seguridad de su pueblo. Efectivamente no se puede generalizar, pero también se
debe tener presente que muchas personas importantes en los países, han llevado
a cabo funciones fundamentales como gobernantes o líderes y estos han cometido
delitos contra los mismos de su pueblo.
Las relaciones de
poder en todos los gobiernos del mundo, se han encontrado situaciones
complejas; en algunas ocasiones países que infringen las mismas leyes
establecidas, por lo tanto, la ciudadanía se encuentra insegura y son víctimas
de decisiones incorrectas. En Latinoamérica, los profesionales en Criminología
han llevado a cabo a lo largo de los años y sus respectivas funciones en la
sociedad, estudios importantes en cuanto a las conductas criminales con
respecto a las relaciones de poder.
La justicia se
necesita y es fundamental el cumplimiento de ello en los gobiernos de los
países; es verdad que la ciencia de la Criminología cumple un rol esencial en
la sociedad junto a las formas de gobiernos, ya que realiza y aplica sus
diferentes disciplinas para el control social, asimismo para lograr sus
objetivos como tal en las investigaciones; además de la prevención de los
delitos.
Pero es necesario que
los líderes sociales hagan más conciencia de las responsabilidades que asumen
en los puestos políticos porque los ciudadanos se pueden sentir más inseguros
de lo que muchas veces se sienten las personas, con esto se hace referencia a
la inseguridad ciudadana. El estado y las instituciones gubernamentales están para
ayudar y proteger a las demás personas de la ciudadanía brindándoles la
seguridad, así como servicio que los pueblos necesitan.
Muchos gobiernos han
dado un ejemplo excelente mientras que otros no lo han dado como tal; en todo
caso los crímenes de estado deben estar bajo el control de las mismas
autoridades, de manera que las inspecciones de igual forma los registros,
conductas de las personas líderes deben ser custodiadas para el buen funcionamiento
de las relaciones de poder con la sociedad para la seguridad de la misma.
El rol de la
Criminología, sigue haciendo sus diversos estudios en los ámbitos que ha este
le corresponde; gracias a esta ciencia y otras disciplinas se ha detectado
situaciones complejas y delictivas a tiempo; es decir antes de que el o los
daños fueran más grandes de los planeados.
En otras palabras, las
personas deben cuidarse a sí mismas y velar por la seguridad en los distintos
lugares donde se encuentren ya que los problemas sociales no se pueden
generalizar ni se puede incrementar la inseguridad en las cosas que más bien
benefician a las personas, sino que los controles sociales se pueden tomar como
un método para hacer perspectivas convenientes o no; que los individuos puedan
ser conscientes e identificar las cuestiones que los puede perjudicar. Un
llamado de advertencia es algo fundamental que las personas pueden tomar de la
ciencia de la Criminología porque la carencia o infracción de leyes en
ocasiones surge de manera espontánea pero así mismo se debe confiar en el
trabajo y esfuerzo que las autoridades, así como el estado implementa por la
seguridad de todos y cumplimiento de las leyes.
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Crimen de estado en Latinoamérica
Referencias
Bibliográficas
Zaffaronni, E. (2012).
CRÍMENES DE MASA. 2da Edición Ampliada. Ciudad Autónoma de Buenos Aires:
Ediciones Madres de Plaza de Mayo. Recuperado de https://aprende.uned.ac.cr/pluginfile.php/3398958/mod_folder/content/0/Zaffaronni%20-%20Crimenes%20de%20masa.pdf?forcedownload=1
Pinterest. (s.f). Latinoamérica. [Figura1]. Recuperado de https://i.pinimg.com/originals/05/99/51/0599517db2b206610af3a7fba89cac28.png
https://i.pinimg.com/originals/05/99/51/0599517db2b206610af3a7fba89cac28.png
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